El Cometa 12P/Pons-Brooks: Un Visitante Cósmico que Deslumbra por su Historia y Misterio
Los cometas, esos misteriosos cuerpos celestes que surcan el firmamento, han cautivado la imaginación humana desde tiempos inmemoriales. Son astros compuestos principalmente por hielo, polvo y gases, y se distinguen por sus largas colas luminosas que se extienden a medida que se acercan al Sol. Estos viajeros cósmicos provienen de los confines del Sistema Solar, y cada vez que se acercan a nuestra estrella, nos brindan espectaculares exhibiciones celestiales.
Este mes, los ojos de los aficionados a la astronomía estarán puestos en el cometa 12P/Pons-Brooks, que está pronosticado para alcanzar su punto más brillante en su aparición de 2024 el 21 de abril. En ese momento, se encontrará a una distancia de 0.78 UA del Sol y a 1.60 UA de la Tierra.
Este cometa, de 35 kilómetros de diámetro, encierra una historia fascinante que une a dos de los mayores cazadores de cometas que han existido.
El nombre científico del cometa, 12P/Pons-Brooks, rinde homenaje a los astrónomos Jean-Louis Pons y William Robert Brooks, quienes, aunque nunca se conocieron, quedaron unidos por este objeto celeste que visita la Tierra cada siete décadas. Ahora, desde lo más profundo del Sistema Solar, este cometa regresa para deleitarnos con su presencia.
Sin embargo, desde Córdoba, su observación el 21 de abril será muy difícil, inclusive con telescopios o binoculares ya que alcanzará su punto más alto en el cielo durante el día y no estará más alto que 7° sobre el horizonte al anochecer.
Los cometas son objetos altamente impredecibles, ya que su brillo depende de la dispersión de la luz solar por las partículas de polvo en la coma y la cola del cometa. Esta materia polvorienta se aleja continuamente del núcleo del cometa, y su densidad en un momento particular está determinada por la tasa de sublimación del hielo en el núcleo del cometa, a medida que es calentado por los rayos del Sol. Además, depende de la cantidad de polvo que se mezcle con ese hielo. Esto es muy difícil de predecir con anticipación y puede variar considerablemente incluso entre las sucesivas apariciones del mismo cometa.