Descubren un asteroide próximo a la Tierra
El 27 de diciembre de 2024, el telescopio ATLAS, ubicado en Chile, detectó por primera vez un nuevo asteroide, bautizado como 2024 YR4. Con un tamaño estimado de entre 40 y 90 metros, su hallazgo activó de inmediato el protocolo de Defensa Planetaria, un procedimiento internacional diseñado para evaluar y mitigar posibles amenazas de impacto contra la Tierra.
¿Por qué se activó el protocolo de Defensa Planetaria?
El protocolo se activa cuando un asteroide de más de 20 metros presenta una probabilidad de impacto superior al 1 %. En este caso, los cálculos más recientes indican que la probabilidad de que 2024 YR4 impacte con nuestro planeta el 22 de diciembre de 2032 es del 2.2 %. Aunque esto significa que hay un 97.8 % de probabilidades de que no ocurra, la comunidad científica considera este margen suficiente para continuar con el monitoreo y la recopilación de datos precisos.
¿Cuáles son los pasos a seguir?
Tanto la NASA como la Agencia Espacial Europea (ESA) cuentan con un comité de expertos en defensa planetaria. La primera fase del protocolo consiste en realizar observaciones adicionales desde telescopios terrestres y espaciales para determinar con mayor precisión la órbita del asteroide.
Si en el futuro la probabilidad de impacto aumentara, se procedería a una segunda fase que incluiría la planificación de estrategias de mitigación en conjunto con los gobiernos. Además, se evaluaría la posibilidad de desviar el asteroide a una órbita segura.
¿Qué daños podría causar un impacto de 2024 YR4?
Si el asteroide llegara a impactar contra la Tierra, el daño sería localizado. La magnitud del evento dependería del lugar de impacto:
En el océano → Posibles tsunamis.
En tierra firme → Explosión con fuertes temblores y formación de un cráter.
Efectos atmosféricos → Partículas en suspensión que podrían alterar temporalmente el clima.
No sería un evento de extinción masiva, como el que ocurrió hace 65 millones de años, cuando desaparecieron los dinosaurios.
Un futuro con más alertas
El aumento de este tipo de alertas no significa que la Tierra esté en mayor peligro, sino que ahora contamos con mejores herramientas para detectar estos objetos.